El 21 de diciembre pasado, el mismo grupo anunció la probabilidad de tal suceso que con una probabilidad de 1 en 75 podría ocurrir el 31 de enero próximo. También se anunció que realizando más observaciones del pequeño asteroide, mejorarían los cálculos de su órbita y ello permitiría confirmar o descartar el suceso. El 28 de diciembre se anunció que nuevas observaciones habían incrementado la posibilidad del impacto de 1 en 25. Para el 2 de enero, los cálculos de nuevo disminuyeron la posibilidad de encuentro de 1 en 28. Nuevas observaciones permitieron anunciar el 8 de enero que de nuevo la posibilidad de encuentro disminuía de 1 en 40.
Los nuevos resultados anunciados ayer 9 de enero, elevaron la posibilidad de impacto de 1 en 10,000 considerándose así descartado el evento. El asteroide WD5 estará pasando a una distancia del planeta de 26,000 kilómetros, equivalente a 7 radios de la superficie. Aún cuando hubiese aún error de cálculo, el asteroide no estaría pasando a menos de 4,000 km de la superficie del planeta. La posibilidad de tal impacto había entusiasmado a la comunidad astronómica ante la oportunidad de ver por primera vez el encuentro entre un asteroide y un planeta. En 1994 fue posible ver el encuentro de un cometa, el Shoemaker-Levy 9, con el planeta Júpiter. Esta experiencia en cuanto a la variación de la probabilidad es típica, ya que siendo tan pequeños y débiles en brillo los asteroides, el determinar sus orbitas precisas requiere de muchas observaciones hasta que se cuenta con parámetros confiables
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